La responsabilidad del estudiante de psicología

     

            John Dewey propuso que la pedagogía, para ser eficaz, debía considerar que el proceso de aprendizaje se genere en la interacción con el contexto, por lo cual consiste en una experiencia cooperativa. Sin embargo, entiendo que el proceso constructivo que pueda surgir de un aprendizaje cooperativo ha estado ausente (en muchas ocasiones) durante mi experiencia como estudiante graduado de psicología. Me refiero a que no necesariamente ha sido una falta de responsabilidad por parte de los profesores o de los estudiantes. Sino que he notado una enajenación en algunos(as) estudiantes acerca de la realidad profesional de la psicología en Puerto Rico.

            Esta realidad se hace aún más evidente cuando se tratan temas como: la ley número 96 del 1983 para reglamentar el ejercicio de la profesión de la psicología en Puerto Rico, el anteproyecto de ley para reglamentar la práctica de la psicología en Puerto Rico, el reglamento general de psicólogos de Puerto Rico y normas éticas de la profesión de la Junta Examinadora de Psicólogos (2013) y el nuevo examen de reválida (conocido como el EPPP) para licenciar al profesional de la psicología. Estos temas suelen ser discutidos en algunos salones de clases teniendo como resultado la falta de discusión, la enajenación o el silencio como respuesta que asimila la desinformación o la desorientación por parte de los/as estudiantes de psicología. Esta desorientación podría llevar a la aceptación de aprendizajes vagos que tengan como consecuencia una sobreestimación de la realidad laboral de la psicología en Puerto Rico. 

            Hace falta desarrollar en estos estudiantes un sentido de pertenencia, urgencia y de suma preocupación por su futuro como profesionales. Más allá del compromiso que tienen las universidades y los(as) profesores(as) con la educación, recae en nosotros la responsabilidad de orientarnos y mantenernos actualizados en los cambios que ocurren en nuestra profesión. Entiendo que esto podría sonar como un discurso que daría un profesor en el salón de clases para fomentar la participación activa de sus estudiantes en la discusión de los temas asignados por un prontuario. Pero lo digo como estudiante de psicología, con la indignación que siento cuando veo el potencial de muchos(as) y la participación de pocos en los procesos que nos afectan directamente y que no hacemos nada para cambiarlos.

            Debo mencionar que existen grupos estudiantiles y profesionales que actualmente se encuentra luchando por el futuro de nuestra profesión. Algunos de estos se han dado a conocer en las redes sociales, en los medios de comunicación y mediante correos electrónicos. Uno de los movimientos actualmente más fuerte es el grupo de De Frente a la Reválida S-EPPP para psicólogos en Puerto Rico. Sus esfuerzos lograron que se realizaran unas vistas públicas el pasado miércoles 8 de abril de 2015 a las 10:30 am en la Sala de Audiencia 1 del Capitolio con el propósito principal la implementación de los exámenes de reválida requeridos al amparo de la Ley 281-2012 para poder ejercer la profesión de la psicología en Puerto Rico.


Pintura por Greta Enriquez


            Por otro lado, es posible comenzar a integrarnos mediante la colaboración, la participación y el cuestionamiento continuo de lo que no sabemos y en determinadas circunstancias, de lo que tememos preguntar. Se hace necesario más que nunca el involucramiento en asociaciones estudiantiles y/o profesionales que permiten el acceso a experiencias prácticas e integrativas más allá del entorno académico. Estas agrupaciones sirven como un modelo de aprendizaje y una preparación para el mundo laboral. De la misma forma, permiten el establecimiento y desarrollo de lazos amistosos y profesionales entre distintos(as) psicólogos(as) de distintas especialidades en Puerto Rico.

            Se hace cada día más necesario el desarrollo de un hábito por la lectura de literatura científica, textos académicos, guías profesionales, análisis de videos instruccionales y la participación en convenciones y asambleas relacionadas a nuestras áreas de especialidad e interés. Estos y muchos otros medios de comunicación e información permiten nuestro continuo crecimiento como estudiantes e intelectuales. También se hace imprescindible compartir la información adquirida con nuestros compañeros (estudiantes y/o profesionales) psicólogos puertorriqueños para el desarrollo de nuestro conocimiento continuo.  

            Estos hábitos, de leer, escribir y conversar entre estudiantes y profesionales, deben convertirse en una inquietud constante, de manera que nuestro impacto sea significativo, ético y duradero.

            Debemos tener en cuenta que la educación es nuestra responsabilidad y no se limita a la secuencia curricular de las distintas universidades que ofrecen los distintos grados académicos en psicología. Un aprendizaje continuo es solamente posible mediante la colaboración  con las distintas especialidades que comprende nuestra disciplina. Entiendo que existen diferencias entre los/as profesionales basadas en mitos o creencias erróneas que nos separan e individualizan. Me parece que nos toca a nosotros(as), la nueva generación de estudiantes y profesionales, lograr romper con las barreras que nos separan y unir nuestros esfuerzos para poder comenzar a relacionarnos dejando a un lado los prejuicios.

            A largo plazo, la colaboración y la unión con otras disciplinas es más que necesaria. Esto se debe a que los problemas de nuestro país son demasiado complejos y requieren un acercamiento interdisciplinario para tener un impacto significativo y proveer soluciones realistas. De esta manera este movimiento de información, de crecimiento como estudiantes y profesionales, de adaptación a nuestra realidad laboral y de colaboración será posible. Se hace evidente que hay que tener presente que esto requerirá tiempo, meditación y constante revisión por parte del estudiantado y los profesionales. Pues somos el presente y el futuro de nuestra profesión y no existe otro cambio que el que logremos con nuestro esfuerzo unido.  

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