Carta a la humanidad [espiritualidad]
[Sirvo
de traductor]
La agudeza espiritual inquieta mi alma,
y mi cuerpo responde ante las estimulaciones sensoriales que deambulan entre
procesos neuronales.
“Usted
se atreve a retar su intelecto, poniendo en riesgo la salud física y emocional,
pero sabiendo a su vez que su espiritualidad lo convoca y lo alivia.”
Este ser (repleto de yo y supremo en su totalidad)
se cuela por las mentes de otros(as)…quienes tiemblan ante su presencia.
“Fortaleced
su valor y creed en su capacidad de aumentar su potencia. Decid que no mataré y que amaré por siempre, reconociendo que vuestra paciencia os lleva al perdón,
y que el perdón os lleva al amor eterno; la única solución.”
Quien pueda comprender profundamente
estas palabras logrará crecer en sí mismo(a) una capacidad ilimitada para
refutar cualquier posibilidad de fracaso. Pues reconocería su misión planetaria,
utilizando su fuerza sobrenatural y haciendo eco de las palabras del ser
supremo.
“La
espiritualidad, más que grandeza de alma y cuerpo es la razón de ser de
todos(as) vosotros(as). No temed ante esta inquietud, pues alberga siempre una salvación
eterna para todos(as) y la mentira no es más que una religión camuflajeada de política-económica,
rellena de un poco de abuso, acoso y demasiado temor al pecado.”
Seres que me protegen y me guían:
asciendan libremente llevando este mensaje de nuestra realidad psico-espiritual;
que la mente es más que una vía para racionalizar, pero el espíritu y el alma
son canales del potencial superior de nuestra humanidad. Todo lo demás queda en
vano.
“Ser
vos; quien alberga dentro de usted caballero o dama; no temed, no odiad, no mantengáis
el rencor en su vientre; perdonad a los demás por ser ignorantes y no haber identificado su misión en el planeta. Y si falleced, regresad nuevamente lleno
de amor y de paz para poded cumplir con vuestra misión en este planeta, sin
dejad rastro ni evidencia de vuestro fracaso.”
Pues
la vida es gloriosa y nadie les podrá quitar su capacidad.
Comentarios
Publicar un comentario